Como empleadores o empleadoras, contribuimos a dignificar su trabajo, garantizar sus derechos y el bienestar de sus familias. Al estar inscritas al IMSS ellas podrán contar con seguridad para su retiro y acceso a una pensión por invalidez y vida, tendrán acceso a atención médica (servicios médicos, hospitalarios, farmacéuticos y atención obstétrica) para ellas y sus personas beneficiarias.
En caso de enfermedad o accidente de trabajo, como persona empleadora tendremos la tranquilidad de que podrá recibir atención y en caso de ser necesario, solicitar incapacidad, sin que esto suponga un gasto catastrófico para nosotras. Además, podrán acceder a prestaciones sociales como guarderías para el cuidado de sus hijos e hijas, y velatorios.
Al registrarla al IMSS los beneficios para ambas partes consolidan una relación laboral más duradera.